Trastorno del Espectro del Autismo, ¿es un fake noticiable?
YO NO RENUNCIO
Como lectora, últimamente parece que tengo que renunciar al rigor informativo de los medios de comunicación. Parece que también tengo que renunciar a contar con políticos informados y responsables que no difundan conceptos equivocados y cerriles propios de siglos pasados en los que se presumía la ignorancia de los ciudadanos.
Autismo. ¿Fake noticiable?.
Renunciar al rigor informativo de los medios de comunicación.
A las temerarias declaraciones de un político que aspira a ser presidente y que utiliza la palabra autista a modo de arma arrojadiza para descalificar un gobierno, se suma ahora la noticia de El Mundo publicada este 4 de abril. El periódico recoge un informe del Pentágono que sugiere que el asperger o el autismo podrían motivan las acciones de un criminal de guerra. Publicar esto así, sin contrastar y sin puntualizar, con un titular tan ofensivo, adolece de una falta de rigurosidad preocupante y es un insulto a la inteligencia de los lectores y, en especial, a los colectivos neurodivergentes. En primer lugar, porque ni el asperger ni el autismo son enfermedades. En segundo lugar, porque recién celebrado el Día sobre la concienciación del Autismo, ese texto ningunea el trabajo y el esfuerzo por la inclusión de tantas asociaciones, familias y afectados.
Autismo. ¿Fake noticiable?.
Ni el asperger ni el autismo son enfermedades.
Estoy segura de que el ilustrado autor del estudio, no cuenta en su haber con ninguna de estas “aberraciones” que tiene a bien enumerarnos. Si la neurodivergencia corriese por sus venas tendría la empatía, la sensibilidad y la honestidad que caracterizan a este colectivo para no escribir un texto semejante.
Tampoco tiene una pizca de neurodivergencia el periódico que no duda en transcribir una información semejante sin confrontar datos o entrecomillar. Somos víctimas de nuevo de este ejercicio tan poco profesional del corta y pega que está invadiendo el espacio antes reservado para un periodismo serio.
Asumo, por tanto, que tengo que renunciar a una prensa contrastada y responsable. A lo que no renuncio es al derecho de expresión para denunciar agravios como éste. Y mientras me asista la Constitución en su artículo 20 y tenga voz para alzarla, yo no renuncio.
Texto: Marta Martín de Mujeres al borde del TDAH
Diseño: xabie. nextart
Para NeurodiverSí y redtdah
